Las puertas son un elemento fundamental en la vivienda de cualquier persona. Comunican unas habitaciones con otras, permiten que se mantengan las temperaturas en cada espacio, aporta intimidad…Por eso, es muy importante que estén adaptadas al espacio en que se encuentran.

Solemos prestar poca atención a las puertas de la casa. ¿Qué posibilidades interesantes existen? ¿Las conoce? En un mismo proyecto pueden mezclarse distintos tipos de aberturas –conviene que tengan una línea estética común–, aunque, por supuesto, los sistemas corredizos ofrecen mayor libertad de movimiento.

Pero por supuesto, más allá de prestar atención a los siguientes consejos, siempre es una buena medida solicitar el asesoramiento de expertos en la materia para no cometer errores.

¿Cómo influyen la distribución y el tamaño del cuarto en la elección de las puertas de paso?

La forma en que se relacionan los espacios entre sí, y las medidas y distribución de los ambientes, determinan dónde son necesarias, en que sector de la pared hay que ubicarlas, el tamaño ideal del hueco y, también, el sistema de apertura más cómodo para no entorpecer la ubicación de muebles o radiadores.

Si la distribución es abierta, por ejemplo, habrá menos pasillos y divisiones, lo que se traduce también en menor número de puertas.

En viviendas pequeñas las puertas suelen dificultar aún más el funcionamiento de las zonas de uso; en estos casos, las corredizas son la mejor elección.

¿Cuáles son las medidas que hay que tener en cuenta?

Todo depende del tipo de habitación de que se trate: no requiere el mismo espacio el acceso a un balcón que a un altillo, o la entrada principal que el ingreso al baño de servicio. Por otro lado, siempre hay que prestar especial atención a los muebles que deberán pasar por estos huecos, o si en la casa hay personas que necesitan silla de ruedas.

Para que las puertas corredizas de embutir se puedan instalar hay que contar con el cerco, el ancho útil de paso y el ancho del esqueleto en el que se oculta la hoja. Y según el proyecto pueden quedar huecos que, por su tamaño o diseño, necesiten una solución a medida. Si tiene que cerrar un vano amplio, por ejemplo, considere los sistemas corredizos colgados de techo o los pivotantes.

¿Qué sistema de apertura es más conveniente?

Con un ancho de paso libre y un interior sin zonas desaprovechadas por el giro de la puerta –con una puerta corrediza se ahorra aproximadamente 1.5 metros cuadrados de superficie–, el sistema corredizo no tiene competidor.

La corrediza superficial es la única puerta que permite una instalación sin obra. Por eso es muy útil en reformas parciales y cuando el presupuesto para la renovación es más ajustado.

Otros dos sistemas que colaboran para que la puerta pase más desapercibida, consiguiendo estéticas depuradas y un acabado continuo, son el de bisagra oculta y el de hoja enrasada en la pared.

La apertura pivotante deja las paredes intactas y libres de molduras, ya que gira sobre un eje vertical. Es útil también para repartir el ancho de hoja entre dos espacios.

Las hojas se pueden combinar con paños fijos, tanto en los laterales como en el dintel. En este resulta útil instalar un paño de vidrio para no perder la continuidad del techo y ganar luz natural.

¿Cuáles son los materiales disponibles?

Para la estructura: las más sencillas son huecas –su interior se forma con un cartón de nido de abeja, que se reviste con chapa de MDF. Son menos resistentes y su aislación sonora no es tan eficiente. En el grupo más robusto, aislante y de mayor peso estarían las macizas, que pueden ser de madera natural, de tablero aglomerado o de MDF.

Para los marcos: los más resistentes a la humedad son los de madera. Otras alternativas son los de MDF hidrófugos y los de aluminio.

En los acabados: el aspecto final de la hoja se elige en base a una idea de conjunto. Si busca puertas que se integren por completo al resto de la decoración, elija acabados que se puedan pintar o modelos acabados de fábrica. Si llevan tapajuntas, tiene dos opciones: que sean del mismo color de la hoja o, por el contrario, que lleven un color que contraste o las combine con la tonalidad de las paredes.

Las puertas de vidrio son otra opción que permite no solo un mantenimiento nulo, sino la opción de jugar con vidrios transparentes, esfumados o de color. Se puede elegir varios sistemas de apertura, pero conviene que se utilicen cristales templados o de seguridad.

Fuentes: decoracion.atresmedia.com, houzz.es