Hay varios tipos de materiales y modelos, para elegir al hacer, instalar o renovar la puerta del baño. Los más comúnmente utilizados son madera, paneles de PVC, aluminio y vidrio. La elección de los materiales debe tener ventajas y desventajas respectivamente. ¿Qué material debemos elegir para nuestro baño? Lo ideal, como siempre recomendamos, es consultar con expertos en el tema. Pero aquí adelantamos algunas pistas para orientar la búsqueda.
Cuestión de tipos
La elección debe adaptarse primero al tipo de baño en que se utilizará la puerta. En términos generales, el baño puede ser mojado o seco. El primero consiste en un único cuarto que incluye bañera, inodoro y lavabo. Cuando la ducha salpica, el agua mojará todo el piso, por eso se lo denomina baño mojado.
Mientras que los baños secos, generalmente, tienen un área de ducha o bañera con una división, por lo que el inodoro y el lavabo no se mojan cuando nos bañamos. En este caso tendremos entonces dos puertas: la de ingreso principal y la que corresponde a la división entre ambos espacios internos.
De igual forma, tenemos la opción de emplear puertas de tipo batiente (las más comunes) o corredizas, en función del diseño y el tamaño del cuarto de baño. En general, al tratarse de uno de los ambientes más pequeños de la casa, el uso de puertas corredizas permite recuperar valiosos centímetros de espacio, que de otro modo estarían ocupados por el radio de apertura de una puerta batiente.
Puertas de madera
Entre las opciones de puertas de baño existentes, la de madera es la más popular. Esto se debe a que el material es relativamente fácil de obtener. El hábito de usar puertas de madera también hace que muchas personas fabriquen puertas de baño de madera, independientemente de sus ventajas y desventajas. A primera vista, las puertas de madera de calidad dan una impresión sólida y cálida. Especialmente si el panel de madera es más grueso. Y de igual forma resulta agradable la combinación de madera y cristal.
Pero la madera es también un material frágil si se coloca en una habitación húmeda, ya que resulta vulnerable al desarrollo de moho y hongos, lo que hace necesario un trabajo más frecuente de mantenimiento. Por este motivo, este tipo de puertas es más recomendable para baños secos. En caso de utilizarlas en baños mojados, lo mejor es alinear el interior de la puerta de manera que la salpicadura de agua no caiga directamente sobre el panel de madera.
Puertas de aluminio
Este tipo de puerta es adecuada para baños mojados porque es impermeable, a prueba de herrumbre y no se pudre fácilmente. Además de ser más resistente en ambientes húmedos, las puertas de aluminio también son relativamente baratsa. Pero la apariencia rígida, el sonido de la fricción al accionarlas y el panel más delgado pueden hacer que estas puertas resulten menos atractivas.
Por lo general, este tipo de puertas solo se usa en el baño de servicio o bien en la división interna del baño seco. En esta variante, puede ser muy útil una combinación de vidrio extra claro (no transparente) y aluminio. Una excelente idea que permite que la luz exterior se filtre, pero al mismo tiempo preserva la privacidad de quienes están dentro del área de ducha.
Puertas de PVC
Además de las puertas de aluminio, las puertas de baño de PVC o vinilo también son impermeables, inoxidables y fáciles de limpiar. Otra ventaja es la disponibilidad de varios motivos de la puerta del baño, por lo que se logra un aspecto más interesante.
Si bien las puertas de PVC no son tan resistentes como las de aluminio, su precio es relativamente más competitivo. Además también son fáciles de instalar y no requieren el proceso de acabado.
Puertas de acero inoxidable
Este material se utiliza, casi con exclusividad, en baños institucionales o públicos dada su resistencia (no solo a la humedad sino también a las condiciones climáticas y al fuego, por ejemplo), capacidad aislante y facilidad de limpieza. Además, dado que no requieren un mantenimiento constante, resultan mucho más económicas a largo plazo. Aunque si bien existen opciones de acabados elegantes, no es usual utilizarlas en cuartos de baño particulares.
Puertas de vidrio
Este tipo de puerta se usa generalmente para aislar el área húmeda en el baño seco. Las buenas puertas de vidrio tienen un grosor de al menos 1 cm para no romperse fácilmente. Aunque la puerta de vidrio es impermeable y duradera, requiere de un mantenimiento regular: esto se debe a que las salpicaduras sobre el cristal dejarán una mancha visible, reduciendo así la belleza de la puerta. Sin embargo, la limpieza de la mancha es relativamente sencilla.
Fuentes: bellelamansion.co, todosobrepuertas.com, belinox.es