La puerta principal: elegir el “rostro” del hogar
De todas las partes de una vivienda, la puerta de entrada es el primer elemento que salta a los ojos. Cuanto más bonita, mejor impresión tendrán los invitados sobre nuestra casa o departamento. Además, no solo es el primer punto de contacto con la casa sino que normalmente también da acceso a la sala de estar, uno de los espacios más concurridos.
La elección de la puerta de entrada suele ser a veces bastante difícil. ¿Qué es más importante, la estética o la seguridad? ¿Qué color elegir para una puerta de entrada? Veamos algunos tips para acertar a la hora de decantarse por un modelo concreto de puerta.
Diferentes tipos de materiales
Existen varios criterios para elegir una puerta de entrada: hacer la elección entre la estética o la seguridad. Para cuestiones de estética, no hay nada mejor que una puerta de madera maciza, con decoración clásica, al estilo de las villas de los barrios residenciales. Pero la más segura es la puerta de acero.
Los dos modelos presentan inconvenientes, y como siempre, la elección final depende del gusto de los propietarios de la casa. Las puertas de madera son muy elegantes, pero en su contra diremos que se degradan con el paso del tiempo y por eso exigen un mayor esfuerzo -en tiempo y dinero- de mantenimiento.
Por último, cabe recordar que hoy en día muchos constructores recomiendan puertas de PVC, mientras que otros se decantan por puertas de aluminio. La puerta de aluminio es más moldeable y resistente, puesto que se trata de un material poco pesado y de gran resistencia a cualquier tipo de agresión externa. Sin embargo, las puertas principales más utilizadas siguen siendo las de madera y acero.
La madera y sus cuestiones
Pueden tener dificultades con la pintura, el barniz, los insectos o la humedad. Y además son las preferidas de los ladrones. Sin embargo, las maderas son más moldeables y al final se puede obtener una puerta completamente personalizada que responda bien a los gustos de los propietarios.
Y, si se plantea primero la cuestión estética de la casa, la respuesta está clara: elija una puerta de madera, que resulta muy decorativa e imprime un toque acogedor y cálido para ofrecer la bienvenida a nuestro hogar a los familiares y amigos.
Las puertas diseñadas en este noble material, son capaces de resistir los cambios climáticos y tienen una gran capacidad de restauración. La madera es además un material reutilizable y reciclable, atractivo y técnicamente avanzado; son muy seguras por su peso y le dan un toque tradicional a la vivienda. También resultan un buen aislante acústico.
Rostro de acero
En cambio, optar por una puerta de acero requiere cierto espíritu de resignación, puesto que el atractivo visual no suele ser el punto más fuerte de estos modelos (aunque siempre hay excepciones). Este tipo de puertas es mucho más pesado.
Las puertas de acero son más seguras en la medida en que romperlas es más difícil. Además son muy resistentes a la deformación por causas externas, y también pueden ser talladas en relieve para parecer madera. Otra de las ventajas que ofrece este material es que las capas de acero cuentan con un núcleo de espuma que ayuda a mantener el aire frío fuera de la casa, por lo que pueden ayudar al ahorro en el consumo de energía.
Por el contrario, el acero no puede ocultar el paso del tiempo como una puerta de madera o cristal. Las puertas de acero son la mejor manera de impedir el paso de extraños a nuestra casa, porque están equipadas con cerraduras de alta calidad y rejas prácticamente indestructibles.
Fuentes: vix.com, homify.com.mx